JUEGOS DE LOS PRIMEROS AÑOS
Durante los primeros meses de vida el bebé va descubriendo su propio cuerpo, lo veremos disfrutar
emitiendo sonidos o a través del movimiento, meterse el puño en la
boca, cogerse los pies, emitir gorgoteos, gritar... A través del juego
va a ejercitar la vista, el tacto, el oído.
Buscaremos juguetes que favorezcan la coordinación motora y
desarrollo de los sentidos, pero lo que más le divierte es jugar con la
persona que está con él, le encanta que le hablen, le canten, le hagan
cosquillas o le acaricien. Es a través del juego cuando el bebé
empieza a relacionarse.
Pero como ¿podemos estimularlo?
Juegos durante los tres primeros meses:
La vista y el oído no están del todo desarrollados, ve las cosas borrosas pero aprende a seguir el objeto con la mirada y reacciona ante los sonidos. Se guiará más por los sonidos que por la vista. También empieza a distinguir los colores. También disfrutará si le acariciamos la barriga, cuando le movemos los pies y las piernas, o moviéndole las manos y los brazos, favoreciendo además el desarrollo físico del bebé. En esta etapa los mejores juguetes son aquellos que llamen su atención. Debemos buscar juguetes que estimulen la vista y el oído como pueden ser carruseles para colgar sobre la cuna, cajas de música o sonajeros.
Juegos de tres a seis meses:
En este periodo es muy importante el tacto. El bebé se distrae con sus manos abriéndolas y cerrándolas continuamente, toca todo lo que tiene cerca, le gusta tirar del pelo, dar manotazos en la cara, meter los dedos en la boca y tocar a las personas. Al final de esta etapa será cuando podrá coger los objetos con las manos, y esto le permitirá diferenciar formas y texturas. Darle objetos que despierten su curiosidad y que los pueda manejar, incrementaremos la destreza manual. Los juguetes más útiles son las mantas con actividades, juguetes de goma, los gimnasios de actividades, etc. Son juguetes que estimulan al bebé a estirar los brazos y piernas para tocar las cosas.
Juegos de seis a nueve meses:
El bebé ya tiene más libertad de movimientos, estira los brazos para reclamar la atención y empezará a gatear. El bebé es consciente del juego. En esta etapa es muy importante el desarrollo verbal. A través del juego se le habla, se le canta, se le sonríe, en definitiva hay una relación y una comunicación con él, que contribuye a que el bebé repita las palabras que oye a través del balbuceo y que al cabo de un año convertirá en frases sencillas.
Juegos de nueve a doce meses:
El bebé ya sabe expresarse para conseguir lo que desea, señalando
con el objeto que quiere, y es fácil identificar su juguete preferido.
Puede imitar y reconocer el sonido de animales.
Es muy importante la comunicación, mucho más que etapas
anteriores, porque el niño ya comprende, es muy sensible a las
muestras de afecto, y se estrechan mucho más los lazos afectivos.
Al final de esta etapa se desarrolla la sociabilidad del bebé,
observaremos que le gusta estar con otros bebés, pero aún no es
capaz de compartir los juguetes, será a partir de los tres años cuando
el niño será capaz de jugar con otros niños de su edad.
Durante el primer año de vida resulta fácil divertir al niño, cualquier
demostración de interés o cariño por nuestra parte hace se sienta
feliz. No olvidemos que el juguete favorito del niño es su propio
cuerpo y la persona que está con él. No olvidemos tampoco que a
través del juego podemos favorecer su desarrollo.
Ejemplos de juegos de toda la vida
Cu-cú
Misiño gato
Cinco lobitos
Los pollitos
Juegos con los dedos
Las tortitas
A la buena ventura
La libra de carne
Pajarito sin cola
La hormiguita
Al paso
Al caballito
Los patos
Un hombre subía
Arre borriquito
Las campanas de Montalbán
Aserrín aserrán
A remar, a remar
Esta manita
Esta barba
Daba, daba
Puño, puñete
Pin pin
Pipirigaña
Las cabriñas de Juan Barbero
Pinto pinto